Del auge de líderes carismáticos a la reconfiguración de la oposición: un análisis profundo de la ultraderecha en ocho países latinoamericanos
Autor: Sisella | [email protected]
28 de noviembre de 2023 16:23
La región de América Latina ha experimentado un notable ascenso de la ultraderecha en los últimos años, marcando un cambio significativo en la dinámica política. Desde líderes carismáticos como José Antonio Kast en Chile, Jair Bolsonaro en Brasil y Javier Milei en Argentina, hasta fenómenos políticos como el bolsonarismo, el panorama político latinoamericano se ha visto transformado por la irrupción de movimientos y líderes de extrema derecha.
Análisis regional: tendencias comunes y factores determinantes
Un estudio de la Fundación Friedrich Ebert, abordando la ultraderecha en ocho países latinoamericanos, ha identificado elementos comunes que caracterizan este fenómeno. Entre ellos se encuentran el autoritarismo, el nativismo y el populismo, sugiriendo una relación directa entre el ascenso de la ultraderecha y la insatisfacción ciudadana. El politólogo Cristóbal Rovira destaca que este aumento no está necesariamente vinculado a un giro conservador del electorado, sino más bien a la oferta política que activa demandas latentes en la sociedad.
Argentina: Javier Milei y la innovación política
En Argentina, la figura de Javier Milei ha irrumpido con fuerza, capitalizando el descontento general a través de un discurso populista y antiestablishment. Su ascenso se basa en un enfoque libertario anti-Estado, crítico hacia las élites políticas y con posiciones conservadoras en temas culturales y de seguridad. A pesar de la debilidad de su coalición, La Libertad Avanza, Milei ha ganado terreno y enfrenta desafíos en su presidencia debido a la falta de recursos y apoyo político.
El Salvador: Nayib Bukele y la evolución ideológica
En El Salvador, Nayib Bukele, inicialmente identificado como de «izquierda radical», ha evolucionado hacia posturas de ultraderecha durante su mandato. A pesar de críticas por violaciones a los derechos humanos, su régimen de excepción ha ganado popularidad. La maleabilidad ideológica de Bukele, combinada con medidas propias de la ultraderecha, plantea incertidumbres sobre el futuro del régimen autoritario salvadoreño.
Chile: José Antonio Kast y la convergencia programática
José Antonio Kast y su Partido Republicano en Chile representan una respuesta a la convergencia programática entre coaliciones de centroizquierda y centroderecha. Su éxito en las elecciones de 2021 y el rechazo a propuestas constitucionales en 2022 lo consolidan como la principal fuerza política en Chile. La ultraderecha chilena destaca por su autoritarismo social y populismo, criticando a una «élite corrupta» y promoviendo principios neoliberales.
Colombia: María Fernanda Cabal y la ausencia de una fuerza nacional
En Colombia, la ultraderecha contemporánea no tiene un partido nacional propio, pero figuras como María Fernanda Cabal, vinculada al Centro Democrático, lideran el movimiento. La falta de liderazgo claro en la derecha tradicional y la inclinación hacia posturas más extremas generan incertidumbre sobre el futuro político en el país.
Perú: Renovación Popular y la hiperfragmentación de la derecha
En Perú, Renovación Popular, liderada por Rafael López Aliaga, ha surgido como una alternativa de ultraderecha en un contexto de hiperfragmentación política. Aunque no ganó la presidencia, su narrativa populista antiestablishment y su enfoque conservador han dejado al fujimorismo (las políticas y la ideología política del ex presidente peruano Alberto Fujimori, así como el culto a la personalidad construido en torno a él y sus políticas) como defensor del establishment económico.
México: AMLO y la ausencia de una reacción conservadora significativa
En México, la transición a la democracia en 2000 consolidó a Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y Partido de la Revolucion Democratica (PRD) como principales contendientes. Sin embargo, la presidencia de López Obrador no ha generado una reacción significativa de la ultraderecha, a pesar de intentos como el movimiento FRENA – Frente Nacional Ciudadano. La crítica a la falta de avances en materias culturales podría abrir espacio para la irrupción de fuerzas de ultraderecha en el futuro.
Uruguay: Cabildo Abierto y el realineamiento político
En Uruguay, Guido Manini Ríos y Cabildo Abierto representan la ultraderecha en un gobierno liderado por la derecha tradicional. Su enfoque en la seguridad pública y el conservadurismo moral ha desafiado la «partidocracia de consenso» prevaleciente desde 1994, generando un realineamiento político en el país.
Brasil: Bolsonaro y la consolidación del bolsonarismo
En Brasil, Jair Bolsonaro marcó la irrupción de la ultraderecha, consolidándose como líder con un enfoque conservador y populista. Aunque su imagen se ha deteriorado, el bolsonarismo sigue siendo una fuerza arraigada, evidenciada por victorias significativas en las elecciones de 2022 y la movilización de seguidores.
Impacto regional: reconfiguración de la oposición a gobiernos progresistas
El auge de la ultraderecha en Chile ha tenido efectos contagiosos en Latinoamérica, transformando la dinámica de la oposición a gobiernos progresistas. La reconfiguración de la derecha tradicional, la pérdida de liderazgo claro y la inclinación hacia posturas más extremas marcan un cambio significativo en la política regional.
Desafíos y perspectivas futuras
El aumento de la ultraderecha plantea desafíos para la estabilidad política y la protección de derechos en la región. La maleabilidad ideológica de algunos líderes, la falta de liderazgo cohesivo en la derecha tradicional y la hiperfragmentación política son factores que podrían definir el futuro político de América Latina. La necesidad de abordar las causas estructurales de la violencia y encontrar estrategias sostenibles a largo plazo se destaca como un imperativo en medio de estos cambios políticos.