Las mejores festividades que puedes conocer en el mundo Hispano

¡Descubre el fascinante mundo de las tradiciones hispánicas! Te llevaremos de viaje por países como México, España y Colombia, para que conozcas las fiestas más famosas de cada uno de ellos.

Día de los muertos, México

Una de las festividades más conocidas del mundo hispanoamericano es El Día de Muertos. El Día de los Muertos es una festividad de origen indígena en México, celebrada el 2 de noviembre, en honor a los fallecidos. Durante estos días, se cree que las almas tienen permiso divino para visitar a su familia, lo que transforma la festividad en un momento de alegría y conexión entre los vivos y los muertos. Para empezar, es reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2008, esta celebración ha mantenido su esencia al largo del tiempo, aunque se ha adaptado a las influencias cristianas y se ha expandido a otras regiones de América Latina. La festividad incluye altares decorados con flores, velas, comida y fotos de los fallecidos, simbolizando la unión entre ambos mundos. Una de las figuras más conocidas es La Catrina, creada por José Guadalupe Posada, que representa la igualdad entre los vivos y los muertos. Con relación a la comida tradicional, esta es colocada encima de los altares, más en concreto, la comida preferida del muerto. Algunos ejemplos son el mole, los tamales, las enchiladas y bebidas con tequila o mezcal. Además, es tradición que las familias visiten las tumbas para limpiar y decorar, creando un ambiente festivo. Así siendo, no pierdas la oportunidad de visitar esta festividad, pues es un evento profundamente significativo, animado y popular del mundo hispanoamericano que celebra la vida a través del recuerdo de los que ya no están.

Las Fallas, Valencia, España

Las Fallas, declaradas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, son una fiesta tradicional de Valencia, celebrada del 15 al 19 de marzo, y que consiste en la exposición de monumentos escultóricos de madera o papel marché en calles o plazas para estos sean admirados hasta que se queman. Su origen vino de una antigua tradición para celebrar la llegada de la primavera, donde los carpinteros quemaban objetos que habían sobrado en sus talleres, en vísperas de San José, el patrón de esta misma profesión. En el 15 de marzo los monumentos falleros son montados en las calles, lo que llamamos la “Plantà” y en el 19 ocurre la “Cremà” donde las fallas son quemadas por la noche y pone un fin a esta fiesta. Sin embargo, esta fiesta no es solamente una exposición, sino un concurso. Al largo de su período sucede una tradición titulada Exposición del Ninot, donde cada comisión presenta su ninot, que son esculturas individuales o grupales que cuentan su propia historia, y el público elige el Ninot Indutalt, o sea, la única construcción que se salva del fuego y es preservada en el Museo Fallero. Las fallas reflejan la identidad, la creatividad y el sentido crítico de los valencianos, además es un festividad donde el arte se une para celebrar la llegada de la primavera, en un ritual de renovación.

La Feria de las Flores, Medellín, Colombia

La Feria de las Flores es un evento que se celebra anualmente en Medellín, Colombia, usualmente al final de julio y comienzos de agosto. Esta comenzó en 1957 como una manera de honrar la cultura paisa y a la tradición de los silleteros, quienes históricamente transportaban flores desde las montañas hasta la ciudad en silletas, o sea, estructuras de madera. Actualmente, este evento se ha convertido en una de las festividades más importantes de Colombia, con una duración de aproximadamente 10 días, ofreciendo una variada programación que incluye conciertos, desfiles, como el Desfile de Autos Clásicos y Antiguos , exposiciones de flores, y eventos tradicionales, siendo lo más importante El Desfile de Silleteros, donde agricultores de Santa Elena llevan a la ciudad coloridas silletas llenas de flores, creando espectáculo visual de gran belleza. Además, hay una amplia variedad gastronómica que destaca la cocina local. Este evento es popular y permite a las personas disfrutar de la calidez y la alegría de la cultura antioqueña, del espíritu de la «ciudad de la eterna primavera», así como el homenaje a la biodiversidad y de las costumbres agrícolas locales.