¿La Inteligencia Artificial es realmente tan inteligente? Al mismo tiempo que revoluciona nuestra forma de trabajar, simplificando tareas, también supone una amenaza: la capacidad de sustituir a los humanos y de acabar con nuestra fuente de rendimiento.
Hablando desde una perspectiva histórica, la IA no es un concepto nuevo. Inventado por el científico John McCarthy en 1950, su crecimiento a lo largo de las décadas fue impulsionado por avances como el uso de redes neuronales, así como el “Unidades de Procesamiento Gráfico” (GPU) que han acelerado su capacidad de procesamiento. Estas innovaciones permitieron la creación de sistemas de aprendizaje que imitan el funcionamiento del cerebro humano, proporcionando una IA más eficaz.
En lo que se refiere a la historia y orígenes, fue en los años 90 que se desarrolló la primera inteligencia artificial tal como la conocemos hoy. Sin duda, se ha convertido en una máquina que busca visas para ayudar a las personas y dirigir sus actividades en el lugar de trabajo.
Además, un punto positivo de la IA es el aumento de la productividad en sectores como el comercio. La IA puede automatizar las recomendaciones individuales a cada cliente, optimizar la experiencia de compra e impulsar las ventas.
Entonces, ¿es la IA una real amenaza para los trabajadores?
La Inteligencia Artificial en muchos campos afecta inevitablemente al futuro del trabajo humano. Recientemente, una empresa decidió despedir a su jefe de prensa y adoptó la IA, utilizando herramientas como ChatGPT para hacer sus trabajos.
Un estudio de McKinsey indica que en 2030, la IA generará un gasto global de hasta 13.000 millones de dólares, lo que aumentará el PIB de América Latina en un 5%. Las nuevas tecnologías están teniendo un impacto negativo en las prácticas laborales, en la industria y en las competencias necesarias para el futuro.
Además, el antiguo consultor de medios sociales, admitió encontrar «bastante interesantes» las comunicaciones impresas realizadas por la IA; este reconocimiento de su potencial y capacidades en una tarea está bien vinculado a la creatividad humana y confirma constantemente que cada vez más personas ven en peligro su lugar y sus esfuerzos.
Lamentablemente, parece que muchas empresas, ven en la IA una solución para sustituir determinadas tareas. Sin embargo, la IA no tiene la capacidad de crear, mantener relaciones humanas, comprenderlas o desarrollar una comunicación basada en las relaciones con ellas.
Por otra parte, en el sector financiero, puede predecir las tendencias del mercado, ayudando a los inversores a tomar decisiones más precisas.
Por supuesto, está claro que la IA puede automatizar ciertos puestos, ya que no es necesario que las personas lo hagan. De hecho, los humanos son esenciales en muchas áreas, especialmente cuando se trata de leyes o de interacción interpersonal.
Los sectores y empresas que ven en esa tecnología una forma de disminuir los costos, sin considerar el factor humano, corren el riesgo de debilitar su reputación y la calidad de su comunicación.
¿Son las Inteligencias Artificiales útiles? ¡Sí, evidentemente! Pero, para hacer un buen trabajo, es necesario y fundamental encontrar un equilibrio donde la IA no pase de una herramienta complementaria, y no sea un sustituto total.
En conclusión, si la IA es prometedora, su aplicación debe ir acompañada de consideraciones éticas para moderar estos riesgos y asegurar que su impacto sea sólo positivo para la sociedad.
Fuentes:
Noticias: https://eco.sapo.pt/opiniao/ultima-hora-inteligencia-artificial-despede-assessor-de-imprensa-em-portugal/ ; https://blog.cubo.network/futuro-da-inteligencia-artificial
Imágenes: Futuro da inteligência artificial: impactos nos modelos de trabalho (cubo.network) ; Intelligence artificielle et humaine sont-elles comparables ? (polytechnique-insights.com) ; Intelligence Artificielle : les définitions à connaitre pour briller en société (talkwalker.com) ; A inteligência artificial vai substituir os seres humanos? (pixeld.news)